En la elección del personaje, sus sentimientos y afectos están siempre presentes; al principio, imitará conductas cotidianas de las personas más cercanas dentro de su ámbito familiar; a medida que el niño crece se amplían sus conocimientos y experiencias y se hacen más variados los temas de juego (carpintero, profesora, astronauta, alienígena, médico, caballero, princesa, tiburón, dinosaurio,...)
Todo el proceso de simbolización está muy relacionado con los avances que se van consiguiendo en el lenguaje, lo que les posibilita llegar a acuerdos con otros niñ@s con los que comparte el juego, lo que implica una aceptación de normas básicas y de roles.
El juego simbólico es hasta los seis años el juego por excelencia, por lo que es necesario en la escuela y fuera de ella, potenciar al máximo este tipo de juego.
Y las aportaciones de los niñ@s nos ayudan mucho a disfrutar de este espacio. Algunas de las nuevas cosas que tenemos son: disfraces, escudos y espadas, una cabeza de dragón...
SARA ha estado unos días de vacaciones en Peñíscola, pueblo costero que tiene un precioso castillo, y nos ha contado con detalle su visita al monumento. Ha traído una espada y un escudo de madera de recuerdo.
Otros niñ@s nos han contado también sus visitas a otros castillos más cercanos: Torija, Pioz, Sigüenza, Molina de Aragón, Buitrago de Lozoya,...
No hay comentarios:
Publicar un comentario